lunes, 19 de diciembre de 2016

¿Quién es esa mujer? [Mine Fujiko to iu onna: La mujer llamada Fujiko Mine]



Cuando se supo que Persona 5 iba a ir de ladrones, y que la persona del protagonista iba a ser Arsène (Lupin), no pude sino acordarme de aquella hora Animax que había en AXN hace añísimos… en la que durante un tiempo emitieron Lupin III. En aquella época no vi más que uno o dos capítulos sueltos, pero a raíz de Persona 5, decidí ver algo más. Así fue que me zampé entera la serie de la chaqueta verde (¡anime de los 70, chicos!), y el principio de la de la chaqueta roja. Y fue así que me volví a encontrar con Fujiko Mine.


Para aquel que no lo sepa, Lupin III es un anime (y un manga) con una larguísima trayectoria, cuyas adaptaciones, que incluyen crossovers con Detective Conan, cambian muchísimo de tono y que entre muchos directores ha tenido el nombre de un joven Hayao Miyazaki a su servicio. Lo narrado son las aventuras de un ladrón, Arsène Lupin III, nieto del Arsène (o Arsenio) Lupin de las novelas del francés Maurice Leblanc. Otros personajes recurrentes son su incansable perseguidor, el inspector Zenigata, y sus colaboradores: Daisuke Jigen, amigo y gran pistolero; Goemon Ishikawa XIII, samurai cuya espada puede cortar cualquier cosa, y Fujiko Mine.

Fujiko Mine. La femme fatale.

O dicho de otro modo: la “tetas”.

No, no me miréis así. Es como se ha tratado al personaje en la mayoría de sus apariciones. Dejémonos de francés y hablemos claro. El propio diseño del personaje empieza por un buen busto. Lupin está siempre babeando con ella. El viejo estereotipo gastado del pervertido que mira, toca y acosa para causar gracia se repite aquí ante el cuerpo de Fujiko una y otra vez. Fujiko suele perder cuando compite con Lupin por un tesoro. Fujiko siempre va a traicionarlos.


 Y sin embargo, Fujiko mola. Fujiko Mine, a pesar del penoso retrato que ha tenido en general, vive para sí misma, y es quien decide si hoy prefiere entregarse al amor o al dinero. Ella no es una niña buena, es una mujer de acción y no va a rendirse a las reglas sociales. Y por eso su personaje siempre me ha confundido.
Siempre que veía a Fujiko en pantalla, o a cualquier otra en el arquetipo de la mujer fatal, he tenido sentimientos encontrados. Me gustan esos personajes por su fuerte individualismo, pero también sé que la mayoría obedecen a la mirada perversa de quien lo censura en la mujer real. Que al fin y al cabo, lo que se busca es un personaje que pueda poner las tetas enfrente de la pantalla.

O en las manos del que lo pague.

Y así es que un día, entre mi círculo de aficionados de Persona para los que de repente Lupin era relevante, encuentro a una persona recomendando fervientemente, una y otra vez, The Woman Called Fujiko Mine. Por más que he buscado, parece que nunca fue localizada en castellano, así que me temo que no puedo dar una traducción oficial.
Una serie de Lupin III, del 2012, centrada en Fujiko. En ese personaje que me intriga y me confunde, me emociona y decepciona. Y dirigida por Sayo Yamamoto, es decir, una mujer. Que además no era la primera vez que hacía una serie protagonizada por mujeres de acción: también es la directora de Michiko to Hatchin, un anime que cada vez tengo más ganas de ver. Aunque seguro que a los que lean esto les sonará más por Yuri!! On Ice. Sumad el nombre de Shinichiro Watanabe en la producción musical, uno de mis directores favoritos, cuyo nombre suele asegurar una buena banda sonora. Tenía que verla.
Me encantó.


Decidme que la barba de Jigen no es hermosa. Atreveos.

Antes que nada, me veo en la obligación de dirigir una alabanza al estilo artístico. La composición de las escenas está sumamente cuidada. El uso del color, el tema recurrente de los búhos, ese sombreado vintage con línea que remite a un estilo artesanal… Con eso y la barba de Jigen, me he pasado episodios hipnotizada.


También quiero mencionar, aunque sea de pasada, a Oscar, único personaje principal que no se encuentra en el elenco usual de Lupin III. Su tratamiento deja bastante que desear para muchos, pero en mi opinión su aparición es ya de por sí significativa, y me plantea preguntas que quizá no me hubiese preguntado de no estar él ahí. Creo que es posible dar una opinión positiva y hasta esperanzadora sobre su arco.

Pero vayamos al punto que más me interesa: Fujiko. Cuando empecé la serie, esperaba tan solo ver el lado positivo de la mujer fatal, la mujer individualista y de acción que es. Por supuesto, tuve de eso. Lo que no esperaba es que estuviese tan bien tratado como está. Me parece una tarea de una dificultad inmensa recoger un personaje con una trayectoria tan amplia y tan poco favorable como es Fujiko Mine y usarla como un icono feminista. Pero en La mujer llamada Fujiko Mine, funciona.
Siempre que hay una mujer sexual y moralmente libre en cualquier ficción uno se pregunta (y tantas veces la respuesta es tan insultante y obviamente afirmativa) si no será más bien cosa del hombre que ha dibujado sus curvas. Eso ha sido verdad para Fujiko durante décadas. Y, sin embargo, cuando termina esta serie tienes la absoluta certeza de que en este caso no es así. Toda la narrativa, las decisiones artísticas, las actitudes de los personajes, etc., confluyen en los últimos episodios para dejárnoslo tan claro como el agua.
Gracias a eso puedo, finalmente, responder a la pregunta del título de esta entrada. ¿Quién es la mujer llamada Fujiko Mine?

 
Fujiko Mine es una mujer inteligente.
Fujiko Mine es una mujer codiciosa.
Fujiko Mine es una mujer que se ha acostado con muchos hombres.
Fujiko Mine es una mujer consciente de sus actos.
Fujiko Mine es una mujer que ha elegido ser así.
Fujiko Mine es la mujer que ves.
Y, ante todo,


 Fujiko Mine es una mujer LIBRE.



Dejo un par de artículos en inglés que leí tras verla por si os son de interés, ojo a los spoilers:

«Sex is Not a Dirty Word: or, Why The Woman Called Fujiko Mine is a Great Feminist Anime» en The Mary Sue. http://www.themarysue.com/the-woman-called-fujiko-mine/

«The Boy Who Went to the Castle: The Woman Called Fujiko Mine and Silenced Queer Narrative» en Tumblr. https://vraikaiser.com/2014/07/28/fujiko-mine-and-silenced-queer-narrative/